Las tranquilas y limpias playas de Conil de la Frontera

Conil de la fronteraCasi a punto de entrar en la estación veraniega, una de las opciones que podemos contemplar al organizar nuestras vacaciones es buscar un destino que nos permita combinar la montaña y el mar, disfrutar de las bellas playas de nuestro litoral pero sin renunciar a la tranquilidad y contacto con la naturaleza que comporta el turismo rural.

Por suerte, en nuestro país tenemos mucho litoral para elegir. Una buena elección es decantarnos por la zona de Cádiz, que tiene unas costas estupendas y unas localidades con un gran encanto. Como Conil de la Frontera, un bellísimo pueblo blanco a orillas del Atlántico, en el que no sólo podemos disfrutar de sus playas los meses de verano sino también en otras épocas, ya que en invierno sus aguas no bajan de los 16º.

Sus playas, de una gran belleza y de arena fina y blanca, son ideales para las familias con niños, ya que sus aguas son tranquilas y seguras, al no haber corrientes en la zona. Además tienen poca profundidad y en ellas no encontraremos medusas ni otras especies similares, lo cual a más de uno le ha amargado en parte alguna vez las vacaciones.

Son varias las playas que encontraremos en la localidad, entre otras la del Chorrillo, la del Roqueo o la del Puntalejo, todas ellas de gran calidad, con aguas transparentes y limpias. Si queremos más tranquilidad podemos dirigirnos también a alguna de las hermosas calitas de la zona, como las de Poniente o la del Aceite.

Una de las más conocidas y concurridas, debido sobre todo a que se ubica junto al Paseo Marítimo de la localidad, con la comodidad que ello representa, es la conocida como Playa Los Bateles, que ofrece todos los servicios necesarios. En ella encontraremos tanto lavabos y duchas como torres de vigilancia y un gran número de bares y restaurantes en los que comer o tomar alguna tapa.

También son muy populares las playas de La Fontanilla y de la Fuente del Gallo, que se encuentran unidas. En ellas también encontraremos diversos servicios, como una zona para aparcar, un puesto de socorro de la Cruz Roja y, por supuesto, también duchas y lavabos. En La Fontanilla se halla ubicado un restaurante especializado en pescado que tiene un gran prestigio.

Después de disfrutar de sus playas, deberíamos darnos una vuelta por Conil, una localidad muy atractiva, cuyas calles y casas ya por sí solas valen la pena el paseo. También podemos visitar alguna de las obras que forman parte de su patrimonio, como la Iglesia Mayor de Santa Catalina, la Torre de Guzmán o la Ermita del Espíritu Santo. También es muy recomendable darse una vuelta por su puerto pesquero y tomarse unas tapas en alguno de los típicos locales de la zona.

A pocos kilómetros de la localidad podemos encontrar confortables casas de turismo rural, donde tendremos la tranquilidad y el descanso garantizados, lejos del bullicio que suele haber en los puntos costeros.

No Hay Comentarios Todavía.

Responder

Mensaje